![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhs4uF17KVE0GVkWXmLd3o0tCk_15IvkPfhVCvGbMkOtUZRhEngFG1VCHwSQmXLoPGTuUgu5YyuO4Hu0YpnM7Q39V3wqnTeSbp_rwU7Z0R417SN3ccZAqy1T3SPNUzkUSpUndJUvRgJ-Xw/s280/en+brazos.jpg)
Anoche soñé que caminaba por la playa en compañía de Dios.
En la pantalla de la noche se proyectaban todos los días de mi vida.
Miré hacia atrás y vi que por cada día de mi vida proyectada en la pantalla, aparecían huellas sobre la arena: una huella mía y otra del
Señor.
Seguí caminando adelante, hasta que todos mis días se agotaron.
Me paré entonces, miré hacia atrás y descubrí
que en algunos sitios había sólo una huella...
Coincidían justamente con los días más
difíciles de mi vida: los de mayor angustia,
los de mayor miedo, los de mayor dolor...
Y pregunté entonces:
"Señor, tú dijiste que ibas a estar conmigo
todos los días de mi vida... ¿Por qué me
dejaste solo justo en los peores momentos
de mi vida?"
Y el Señor me respondió:
"Hijo mío, yo te amo. Te aseguré que estaría
contigo a lo largo de todo el camino y que
no te dejaría solo ni un segundo...
Y lo he cumplido...
Los días en que has visto una huella sola
sobre la arena, han sido los días en los
que te he llevado en mis brazos".
Anónimo brasileño
No hay comentarios:
Publicar un comentario